La hipertensión arterial y enfermedad renal; el ciclo peligroso que puedes prevenir
Dr. Carlos Alberto Guizar Sánchez*
¿Sabías que los pacientes que padecen hipertensión arterial (HTA) tienen una mayor probabilidad de desarrollar enfermedad renal crónica (ERC) y viceversa? Este ciclo es peligroso, pues puede ser mortal si no se controlan ambos padecimientos.
Relaciones peligrosas
Los riñones tienen como principal función filtrar la sangre para eliminar desechos y exceso de agua a través de la orina, sin embargo, cuando estas funciones fallan se conoce como ERC.
Por su parte, el corazón se encarga de bombear sangre por todo el cuerpo, sin embargo, la expulsión de este líquido a través de las arterias puede comprometerse con el desarrollo de HTA, es decir, cuando los vasos sanguíneos se vuelven más rígidos y se dilatan menos en el momento en que la sangre sale del corazón e ingresa a las arterias, causando elevación en los niveles de presión arterial.
Es por ello que, el corazón y los riñones se encuentran estrechamente relacionados. Tan sólo el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en el artículo “Tratamiento de la hipertensión arterial en la enfermedad renal crónica”, estima que entre el 50% y el 75% de los pacientes con ERC tienen HTA.
Protección cardiovascular ante el binomio HTA - ERC
La mejor manera de prevenir la ERC en un paciente con HTA es indudablemente controlar los niveles de presión arterial. Por ello, después de un diagnóstico por HTA, es indispensable que tu médico de cabecera ayude a proteger tus riñones ante la elevación de la presión arterial. ¿Y cómo es eso posible? Normalmente una persona con ERC deberá tener un control estricto de su presión arterial menor a 130/ 80 mmHg (unidad de presión).
Lo anterior se deberá realizar a través de estrategias idóneas que van desde cambios en el estilo de vida como: mantener el peso ideal acorde a tu estatura, realizar ejercicio aeróbico, bajar el consumo de sal, llevar una dieta saludable (frutas, verduras, cereales, productos lácteos bajos en grasa, incrementar suplementos de potasio, etc.), eliminar el consumo de bebidas alcohólicas y el tabaquismo, si se tiene diabetes también controlarla; hasta fomentar la adherencia al tratamiento con combinaciones a dosis fijas de principios activos como losartán-amlodipino, los cuales pertenecen al grupo de fármacos de primera elección para el tratamiento de la HTA, para que de esta manera se salvaguarden tus riñones, mantengas tu presión arterial estable, logrando el éxito terapéutico de manera segura y eficaz.
Tú tienes el control
Para hacer de la vida una historia saludable, como profesionales de la salud debemos mantenernos actualizados, es por ello que existen plataformas tecnológicas como www.medpoint.com.mx, iniciativa impulsada por Laboratorios Silanes, que nos ayuda a proveer de información valiosa y confiable a nuestros pacientes para que prevengan enfermedades como la HTA, de esta manera contribuimos a hacer salud bien hecha en México.
La HTA es una enfermedad silenciosa e incurable, mientras que en la ERC sus síntomas tardan en apreciarse, por lo tanto te preguntarás ¿cómo puedo prevenir tales padecimientos? La respuesta es muy sencilla, y es acudir continuamente al médico a realizarte exámenes clínicos preventivos y siguiendo un estilo de vida saludable, para de esta manera puedas mantener alejadas las enfermedades o inclusive, poder diagnosticarlas de manera pronta y evitar un daño mayor a tu salud.
En México, cifras de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018 (ENSANUT) afirman que hay 15.2 millones de personas con HTA[1], sin embargo, a pesar de que se carece de un registro de pacientes con ERC, el Colegio de Nefrólogos de México (CNM) refiere que alrededor de 13 millones de personas tienen algún grado de daño renal y muchos de ellos lo desconocen[2].
Médico Cardiólogo con especialidad en Insuficiencia Cardíaca y Trasplante por el Hospital Royal Brompton Harefield de Londres. Actualmente es adscrito a la Clínica de Insuficiencia Cardíaca del Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez y adscrito a la Unidad de cuidados intensivos coronarios del Hospital Central Sur Petróleos Mexicanos (Pemex).*